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El rock argentino ha cambiado. Dejó de ser cuestión de estilo y géneros hace tiempo y se alimenta de actitudes y sonidos que lo enriquecen. Si algo distingue a la escena del rock local es su eclecticismo musical y una estética que abre puertas y abraza sonoridades. Quedó claro en las cuatro jornadas que se vivieron y también quedó claro en el bonus track de la Fiesta FA!
Las tres horas de show de Los Piojos en el cuarto día del Quilmes Rock fue el cierre de dos fines de semana inolvidables donde convivieron al menos tres generaciones tanto en los escenarios como en el público. Según la organización, con el día extra del domingo 13 de abril, el festival alcanzó una asistencia de 240 mil personas en total y tuvo a lo largo de las cuatro jornadas un total de 170 bandas.
Esta nueva edición de Quilmes Rock, tres años después del regreso, también en Tecnópolis pareciera haber llegado para recuperar el espíritu rockero que, si bien no estaba perdido, estaba disperso. Fueron jornadas intensas en lo musical, de las que quedaron cruces musicales, buenas versiones, debuts y sobre todo, la demostración de que hoy el rock argentino es un movimiento donde confluyen musicalidades más allá de los géneros y las estéticas. Indie, pop, metal, cumbia rock, reggae, ska y “folklore mutante” se concentraron en una grilla que fue efectiva y supo mezclar nostalgia con sonidos modernos 
En agosto de 2024, cuando se anticipó parte de la grilla se adelantó que habría sorpresas. Hacia fin de año, la noticia del regreso de Los Piojos tuvo como plus la participación de la banda en dos festivales: Cosquín Rock en febrero y Quilmes Rock en abril. Fue acertado. El show de Los Piojos tuvo rock, tuvo emotividad y hasta tuvo el anuncio de un concierto final de esta etapa de regresos para el 24 de mayo en el Parque de la Ciudad.
La banda liderada por Andrés Ciro Martínez llegó al escenario Quilmes a las 21 del domingo con un listado de hits que sacudió Tecnópolis: “Desde lejos no se ve”, “Chac tu chac”, “Babilonia”, “Yira yira” y “Vine hasta aquí” inauguraron el ritual piojoso que terminó pisando la medianoche. El escenario Quilmes fue el lugar donde se encontró por igual aquel repertorio de los 90 que es el sello más preciado de la banda. También pasaron por allí algunos temas del último disco (Civilización, 2007) con temas como “Bicho de ciudad”, “Pacífico” y “Civilización” (que dedicaron a Bahía Blanca). También tuvo su momento de profunda emoción con el homenaje al guitarrista de la banda Tavo Kupinski quien murió en 2011 en un accidente de tránsito.
Lo que siguió fue un listado de canciones hiteras donde la apuesta estuvo en el coro del público en el que se encontraban desde teenagers a cincuentones nostálgicos. El cierre, una vez más, fue con la interpretación del “Himno Nacional Argentino”, en la armónica de Andrés Ciro.
La jornada del sábado había cerrado con otra banda que nació en los 90: Babasónicos. A diferencia de Los Piojos, la formación que lidera Dárgelos no transitó separaciones y tuvo una carrera que fue encontrando identidad y consolidando una estética que hoy lo posiciona como una de las mejores bandas del país. “Bye bye”, “Pendejo” y “En privado” abrieron el show de Babasónicos, quizá la única banda que no modifica su repertorio para enmarcarse en un festival. Un Dárgelos de pocas palabras dejó una actuación inolvidable y un recorrido por todos estos años Babasónicos que sólo dejó buenas canciones y un brillo glamouroso único en el rock argentino.
Una tarde en movimiento
En el Quilmes, el mismo escenario, que en la medianoche Los Piojos cerraron el festival, horas antes había sido el debut de Los Caballeros de la Quema. “Estamos debutando en el Quilmes Rock. Mirá que hay que debutar con cincuenta y pico de años. Un poco ‘virgos’. ¿Cómo se dice ahora? Incels. Falta que hagamos un video con inteligencia artificial donde el ministro de Economía sea un espartano, un guerrero”, dijo Iván Noble, el líder de banda que se reunió nuevamente hace unos años.
Fue la bisagra rockera tras el show de Kapanga que había arrancado bajo el sol de las 16 de un domingo puramente otoñal. “La última vez que estuve en un festival era esta hora y me infarté”, contó el Mono antes de tocar “No me sueltes”, uno de los clásicos de Kapanga.
Mientras en el escenario Rock, Massacre, arrancó su set alrededor de las 17 con “Resurrección” y terminó 40 minutos después con “Diferentes maneras”. “Hay que ser muy cagón para no defender a los jubilados” se escucha decir a Maradona durante el recital de la banda que tiene al frente a Wallas.
Allí, una hora después, La Orquesta Delio Valdéz puso a bailar a miles de personas con “La cancioncita”, “Adiós amor”, “Inocente”, entre otros de los temas que son éxitos para la agrupación que supo recorrer el under, los festivales pequeños y que ahora, en los últimos años son de los números destacados en las jornadas musicales. El rock también tiene cumbia.
No todo es Quilmes ni es Rock: los escenarios del festival
Muchos de los momentos destacados del Quilmes estuvieron en los escenarios alternativos del festival. Uno de ellos fue el escenario Geiser donde el Día 3 del festival (sábado 12) Juliana Gattas desplegó todo su brillo vocal, artístico y pop con una actuación que resultó cautivante. Después de ella, la chilena Javiera Mena también dejó una actuación para el recuerdo. También estuvo Dancing Mood, la banda liderada por Hugo Lobo e Indio. Al día siguiente, recibió a La Mancha de Rolando, La Mississipi y a Pier.
El escenario Pop Art no tuvo descanso. Al anochecer, Lisandro Aristimuño llegó al lugar con una inesperada potencia y realizó un gran concierto en la noche del domingo. Por allí pasaron “Tu mundo”, “Elefantes”, “Me hice cargo de tu luz”, “Para vestirte hoy”, entre otros temas de su conocido repertorio para cerrar con “Es todo lo que tengo y es todo lo que hay”.
Después de él, llegó La Bersuit. Con “El tiempo no para”, “Se viene” y “Yo tomo” abrieron lo que fue uno de los mejores shows del festival, una perfecta antesala para entrar en el segmento final del Quilmes Rock. “Te equivocaste peluca, escuchá a la gente”, gritó Dani Suárez antes de cantar “Se viene”. “Gracias estamos cumpliendo 37 años, loco, gracias, salú”, agregó. También se escuchó una versión de la bonita “Desconexión sideral”, “Toco y me voy”, “Vuelo” junto a Javier Casalla” y Ale Kurz, “Cuatro vientos”, “El viejo de arriba”, “Sr. Cobranzas” que terminó al grito de “y ya lo ve, y ya lo ve, el que no salta votó a Milei”, un cántico que fue común a muchas presentaciones. El cierre fue con “La bolsa” y “Negra murguera”.
También el escenario Enigma fue una sorpresa. En la jornada del sábado La Portuaria fue la banda que le puso brillo al espacio y la gran sorpresa de muchos rockeros que iban de paso fue Tabaleros, la agrupación que tuvo una destacada actuación en la jornada del domingo.
“¿Quién dijo que en el Quilmes Rock no hay folklore?”, dijeron desde el escenario donde interpretaron “Cacique” y “Azúcar y algodón” con todo el público de pie (Enigma era el único espacio con asientos). Después llegó “Penumbras”, de Sandro y más tarde abrió paso a otro cover: “Homero” de Viejas locas. “Somos un grupo que trae el folklore en la sangre”, dijo el vocalista de la banda, José Martínez. “Sentimos el rock muy especialmente, por eso queríamos hacerle un homenaje con esta canción”, agregó. Como en las últimas presentaciones tuvo como invitado especial al Mono, de Kapanga que interpretó junto a ellos “El amor no existe”.
También hubo a lo largo del festival programación para el metal. Desde Rata Blanca en el escenario principal pasando por ANIMAL y Horcas,
Los momentos del Quilmes Rock
De los momentos que quedaron grabados sin dudas está el encuentro de Miranda! con Lali; el homenaje a los veteranos de guerra de Dillom; Turf junto a Milo J en “Pasos al costado”; la irrupción de Trueno en “No llores por mí Argentina” durante Serú Girán, el homenaje; Pablo Lescano, Santiago Motorizado y La Bomba de Tiempo en el recital de Los Fabulosos Cadillacs.
De los cruces también es para destacar a Dancing Mood con Los Auténticos Decadentes y también la aparición de Fernando Ruiz Díaz para cantar “Un osito de peluche de Taiwan”. Juliana Gattas invitó al escenario a Javiera Mena y lograron una versión inolvidable de “Puerto Pollensa”. La Bersuit invitó a Ale Kurz y a Javier Casalla que volvió a dejar otro histórico solo durante la interpretación de “Vuelos”.
Tampoco faltaron anuncios. Los uruguayos de No Te Va Gustar que estuvieron el sábado en el escenario Quilmes anticiparon un concierto junto a la Orquesta Filarmónica de Medellín para el 21 y 22 de mayo en el Movistar Arena. Mientras que El Plan de la Mariposa anunció su primer Argentinos Jrs. para el 18 de octubre.
La emoción fue permanente con la reaparición de Pity Álvarez desde la pantalla para saludar al festival. Saludado entre aplausos y algunas lágrimas se lo escucha decir, “me muero por estar ahí, van a tener que esperar un poco más”, luego de interpretar unos versos de “El rey”.
La aparición de Meme del Real, tecladista de Café Tacvba fue otra de las sorpresas en el Quilmes. Apareció en modo solista en uno de los escenarios principales para interpretar “Aviéntame”, “Princesa” y “Eres”, entre otros temas que saldrán en el próximo disco.
Las jornadas rockeras que tuvieron su centro en Tecnópolis mostraron un público ávido de música propia, de canciones que recuperen una identidad histórica y popular que se pueda compartir y transmitir. El paso de una generación a otra en los escenarios fue la clave para un Quilmes destacado a la hora de pensar la grilla de cada día y deja abierta la eterna pregunta de qué es rock, a la que se suma otra ¿hace falta definirlo?
Quilmes Rock 2025 en números
Más de 240.000 personas asistieron en las cuatro jornadas y rompió récords de convocatoria. Hubo cinco escenarios por donde pasaron 170 bandas y 500 músicos.
Trabajaron 7000 personas en el montaje y sostenimiento de la infraestructura. Fueron 35 hectáreas adaptadas, 400 m2 de pantallas LED, 7.000 metros de vallados y 20 activaciones de marca.
Se estima que más de 3 millones de personas vieron la transmisión vía Flow y Disney+.
Las cifras fueron brindadas por Pop Art, organizadora del festival Quilmes Rock 2025
al de Negras&Blancas.
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